martes, 23 de noviembre de 2010

CAPITULO 0 “EL CADAVER DE LA NOVIA” (IV) Los planes…

CAPITULO 0
“EL CADAVER DE LA NOVIA” (IV)
Los planes…


Parece increíble que las cosas, cuando se le dispara a uno la adrenalina ocurran de una manera tan lenta… Yo no había podido aún asimilar la situación, mi novia comiéndose a un amigo, después de estrangular a su compañera de cuarto, y arrancarle parte de su garganta…

En la cama se podía observar como la sangre caía lentamente en gotas por un costado, como la bolsa de suero y medicinas que a uno le ponen en los hospitales, mientras su pecho, bañado en sangre, por los chorros que salieron de su garganta y habían dejado de fluir…

Aníbal me lanzó para atrás, haciendo chocar mi cabeza contra la pared, la vista se me nublo un poco, pero seguía conciente de la situación que se estaba presentando, y aunque podía ver todo desde una perspectiva como si no fuera mi cuerpo, pude ver como Aníbal pateaba en el pecho a mi novia y la hacia volar hacia la mesa del fondo…

La lámpara calló de la mesa, reventándose el bombillo eliminando la única luz tenue que salía de la habitación, y con mi vista medio nublada no pude observar en que momento había salido Aníbal con David medio cargado del hombro y un intento de torniquete en el cuello con lo que al parecer era una camisa de mujer…

Empecé a tomar conciencia de nuevo, cuando pude ver que ella… Eso, se levantaba de nuevo, y nos observaba con rabia y la mirada de un voraz asesino. Del lado derecho por donde llegamos, había aparecido un muchacho, con mala apariencia, le faltaba la quijada inferior, y la lengua le colgaba como una corbata muy corta de payaso, con un color muy oscuro, posiblemente por la falta de sangre… Del otro lado, el panorama no era mejor, pero al menos, como por un milagro apareció Santiago, con un bate que desconozco de donde lo sacó, reventando la cabeza de aquel ser que nos cerraba el paso…

Yo no pude comprender sus palabras, pero en mi mente todo fue claro, teníamos que salir de ahí… pero yo no me quería ir sin mi novia, más Santiago no dejaba de jalarme y llevarme a la fuerza hacia el frente… un par de puertas cedieron a nuestra espalda, por el peso de quienes en las habitaciones estaban…

Al llegar al ascensor, yo seguía discutiendo para regresar... teníamos que regresar por mi novia, ella y David estaban mal, ambos necesitaban ayuda medica, pero ellos no paraban de gritarme que todos estaban mal y que teníamos que salir de ahí…

Cuando la puerta del ascensor se abrió, una de esas cosas, estaba en el suelo, le faltaban las piernas, su rostro se me hizo familiar al de un amigo de mi novia que estaba en silla de ruedas, pero la verdad, con el rostro tan demacrado, y la ropa en tirones, sin conocerlo en persona, para mi era imposible reconocerlo de verdad si era o no el mismo…

Aníbal, aplastó su cabeza con fuerza, lo que nos permitió escuchar un crujido como de huesos de pollo rompiéndose, cuando en realidad era su cráneo… en el momento no me causo mayor dramatismo la situación, pero cada día escucho una y otra vez ese sonido, con un temible escalofrío en mis huesos, como si fuera mi cabeza la que explotara en aquel chorro de sangre y masa gris desparramada por el suelo.

La puerta de las escaleras ya se nos hacia como lejana, pues entre ella y nosotros ya existían por lo menos 4 o 5 cosas caminando lentamente hacia nosotros, y tras ellos parecía venir mi novia, o tal vez fuera mi mente que la buscaba entre la multitud. En nuestras espaldas, se encontraba aún la puerta abierta de la habitación que observamos al llegar que estaba abierta…

Corrimos hacia ella, Aníbal lanzó a David, en la cama, mientras que Santiago cerraba la puerta lo más rápido que podía, y empezaba a ponerle lo que encontraba, un closet, la mesa de noche, la silla, y todo empujando con fuerza para evitar la puerta se abriera a pesar de que la cerradura, había sido violada y ya no servía de nada…

Atrapados en una habitación, con un montón de cosas deformes, mal olientes, y que deberían estar muertas detrás de la puerta que era nuestra salida. Con un compañero caído, y yo solo podía pensar en su mirada… su mirada de odio, y de astucia animal queriendo atacarme… Ella… Eso ya no era mi novia… mi novia me había abandonado por el apetito de un animal, y la muerte en su sangre.
  
Santiago volteo a vernos con una cara estupefacta, solo salio una palabra de su boca, “Zombies”… yo a pesar de todo primero puse una cara de morisqueta, una sonrisa salía de mi boca, hasta que no pude aguantar mas el momento, y mi risa se hizo conciente para todos, en carcajadas fuertes…

Sin embargo Aníbal estaba serio, verificando a David, y su perdida de sangre, y Santiago intentando de calmarme pero sin quitarse de la puerta, cuando se escucho el primer golpe en ella, y un empuje muy tenue se observo contra las cosas, mas como si hubieran chocado contra la puerta que si hubieran intentado de empujarla realmente.

A mi se me salieron unas lagrimas, no se decir si fue por la risa, por pensar en mi novia como una de esas criaturas de las películas tipo B que sobraban en esos días, y me llegue a preguntar si habríamos caído en alguna filmación de cine que se estuviera realizando en el pueblo.

Aníbal, se apartó de David, y con un gesto de su rostro, viendo al suelo y en negativa comprendí que no había logrado sobrevivir a aquel brutal ataque. Ambos me vieron, pero no de mala gana, sino de incomprensión ante mi rostro que lloraba a moco suelto, mi rostro demostraba completa angustia y desesperación, mientras de mi garganta salía una risa crónica e irónica, de puro dolor y  nervios…

Ya se escuchaban por lo menos 3 personas empujando y golpeando la puerta, después de que Aníbal me golpeó con fuerza el rostro para poder caer en cuenta de nuestra situación y por consiguiente pudiéramos empezar a hacer los planes para salir de ese lugar. Pero de alguna manera estábamos concientes que no sería fácil.

lunes, 15 de noviembre de 2010

CAPITULO 0 “EL CADAVER DE LA NOVIA” (III) El Encuentro…


     CAPITULO 0
“EL CADAVER DE LA NOVIA” (III)
El Encuentro…

    La situación a mi me pareció extraña, a mis compañeros de viaje no tanto. Desde el inicio del pueblo, habíamos notado a unos pobres transeúntes… 3 o 4 tal vez después de atravesar medio pueblo, parecían medio borrachos pero las calles en general parecían desérticas…

A groso modo, ellos creían que posiblemente las personas estarían en algún evento, o en algún partido, vamos que eran las 9 de la noche, y no se escuchaba nada en el campus, y en la ciudad no vimos a nadie tampoco… pero bueno.

Continuamos y los muchachos no aguantaron, tuvieron que detenerse en un local 24H para comprar algunas chucherías, Aníbal fue hasta el lugar solo, mientras yo intentaba de nuevo comunicarme con mi novia la cual, al parecer, ya no tenía baterías en su celular. Puesto que las llamadas eran desviadas inmediatamente al buzón de mensajes sin repicar.

Aníbal llegaba al carro con las manos repletas de chucherías y refrescos, y nos contó algo que nos pareció muy gracioso en el momento. En el local no había nadie atendiendo, empezó a llamar a algún dependiente, para que lo atendiera y le cobrara, y escucho unos ruidos extraños en la parte de atrás de la tienda… Nos comento que cuando se estaba acercando pudo escuchar los gemidos de una mujer y entonces se dio la media vuelta y dejo el efectivo pisado con la caja registradora, sin esperar el dinero de vuelto.

Los muchachos empezaron a reírse mientras se comían las papas, los nachos, y chocolates, junto con las bebidas energizantes, los refrescos y jugos según lo que quería cada uno. Comenzaron a hacerse chistes entre ellos, que el pueblo estaba sumergido en una mega orgía en casa cada uno, que si posiblemente el dependiente se estaba tirando a mi novia, y otro poco de cosas…

Yo preferí no prestarles atención y centrar mis pensamientos en que la encontraría en su cuarto, con el celular dañado después de la excursión, o por lo menos a su compañera de cuarto para que nos dijera donde se reunía ese grupo PRO-Animales al que ella estaba ayudando.

Llegamos a las afueras de los edificios, un pequeño complejo de 4 pequeños edificios de 4 o 5 pisos aproximadamente, de ladrillos por fuera, algunas luces de los cuartos estaban encendidas, y desde abajo pudimos ver las sombras de varias personas moviéndose en algunos de ellos. De hecho según Santiago podía distinguir a una pareja haciendo el amor contra una cortina en las siluetas que veía…

Estábamos en el lado sur del conjunto de estudiantes, yo me baje y casi salgo corriendo al edificio de la derecha, el primero en ser alcanzado desde la entrada sur… El complejo en sí tenía 4 entradas, norte, sur, este y oeste. Y los edificios estaban cado uno en una esquina, noreste, noroeste, sudeste y sudoeste…

En el centro una plaza grande que se encontraba apagada en ese momento, ya que no estaba distribuyendo el agua continua como lo había visto en las fotos de mi novia… ese lugar para ella era especial pues muchas veces se sentaba ahí con sus amigas a estudiar o a sencillamente distraerse un rato hablando entre ellas… hasta habían tenido en una oportunidad, una fiesta que había terminado todo el piso dentro de la fuente con las camisas mojadas y demás… En las fotos de esa fiesta se noto que hicieron desmadres, pero lo gozaron de lo lindo, y en ninguna se veía con otro chico por lo que no me preocupe…

Ahora que pienso mas la cosa, en esa oportunidad se pudo prestar para tantas cosas, y a partir de cierto momento ya ella no estaba en las fotos que me mando… pero no era momento de pensar en el pasado, estábamos aquí, y era hora de irla a buscar.

Mientras me acercaba a la reja, note que el lugar estaba, por lo menos en la planta baja, igual que el campus, desierto. Al final en la puerta norte se observaba un par de chicos sentados contra la reja como pasando una borrachera ya que parecían desmayados, y se podía notar el movimiento rítmico de los pies, de lo que podía ser una pareja, detrás de el edificio noroeste saliendo por un lado y bueno… no debo explicar que parece que estaban haciendo.

Aníbal me detuvo, y al voltearme casi agresivamente por mi entusiasmo para volver a ver a mi novia, estaba tan cerca y ¿quien se atrevía a detenerme en ese momento?… Aníbal me soltó una sonrisa y me dijo seriamente que todo estaría bien que él subiría conmigo… David se paró a su lado, y Santiago solo se sentó en el capó del vehiculo mientras se tomaba una botella de algún alcohol, y observaba el movimiento rítmico de la pareja del edificio noroeste.

Le pedimos no se alejara del carro, y cualquier cosa que nos tocara la corneta, pero no parecía haber nada malo en el lugar por lo que estaría bien, y bueno, no era necesaria tanta gente arriba mientras yo me encontraba con mi chica…

Los tres entramos al edificio, y un olor a podredumbre nos ataco de inmediato, al lado derecho de la entrada vimos como la puerta que daba al basurero estaba abierta, con un gato intentando de comer un pedazo de carne pequeño como un ratón, y muchas moscas revoloteando. Comprendimos que no habían pasado a botar la basura en un tiempo, (ya habíamos sentido el olor a podrido en algunas partes de la ciudad por lo que deben de estar presentando problemas con las compañías recolectoras de basura).

De los 2 ascensores solo 1 estaba funcionando, y me pareció que tardaba una eternidad en bajar desde el quinto piso, aparte que tardo en cerrar la puerta, pues una vez llamado no empezó a bajar sino ya cuando casi nos rendíamos para subir por las escaleras. El silencio del edifico era tal que se escuchaba claramente el traqueteo de las cadenas, y los cables mientras el ascensor descendía, y llegaba a planta baja…

Cuando la puerta se abrió yo me caí de espaldas ante lo que mis ojos veían, una brisa fuerte nos hizo llegar de inmediato el olor a podredumbre que despedía el ascensor, y la mierda de algún bromista en el suelo no era del todo la mejor imagen para alguien que tiene la respiración acelerada y esta nervioso.

Como pudimos entramos en el ascensor, sin pisar mucho la mierda, que según David parecía ser de alguien que tenía hemorragia o una chica lanzo sus necesidades menstruales en el ascensor para terminar de hacer la combinación mas podrida que nadie se pueda imaginar…

Gracias a los Dioses que mi novia se instalaba en el primer piso, pues salimos casi vomitando del ascensor podrido… aún aquí ya David estaba dudando sobre acompañarme, Aníbal se preguntaba como podían vivir entre tanta podredumbre los estudiantes de ese edificio, o si por casualidad abran abandonado el edificio para su limpieza después de alguna broma estudiantil y nadie hubiera querido regresar…

Giramos a la izquierda por defecto, para escapar del olor, y a nuestras espaldas observamos una puerta de una habitación abierta… Toda el área central era para los ascensores, escaleras y equipos de emergencia, por lo que las habitaciones daban todas con alguna ventana a la calle…

La habitación estaría completamente detrás de nosotros, por lo que comenzamos a caminar por el pasillo, y escuchamos algunos golpes en las habitaciones mientras pasábamos, de uno de ellos había un liquido corriendo por debajo de la puerta lentamente, y pegostozo, pero entre la oscuridad de las medias luces que estaban encendidas, (las que estaban prendidas), no pudimos notar bien que era…

Llegamos a la puerta de la habitación y me posicione delante de la misma, David a mi izquierda y Aníbal a mi derecha detrás de mí, y aún cuando sabía que tenía a mis amigos ahí para apoyarme tenía miedo de lo que me encontrara, tome la manilla sin hacer ruido y me detuve antes de girarla, por mi mente paso la imagen de mi novia con otro chico, pero después pensando en la podredumbre del lugar difícilmente concebí que pudiera estar con otro tío…

Moví la perilla y abrí la puerta lentamente, no dije nada, una luz de la mesa del fondo estaba encendida, era la única luz de la habitación, y logre notar un exuberante cuerpo sobre la cama de la derecha, no tenía ropa, con una piel blanca y sedosa aún en la distancia, casi montado sobre otro cuerpo en la cama, y cuando se levantó y se irguió sobre su espalda, su cabello, aunque sucio, seguía siendo hermosamente castaño claro natural, la silueta la reconocí de inmediato… Era ella y estaba sobre alguien más…

Palidecí, me mareé, quería vomitar, llorar, gritar, no sabía que hacer y en ese momento Aníbal me apartó y encendió la luz de la habitación mientras que David entró grabando en video con su celular toda la situación, (era como si lo tenían preparado en todo momento pero yo no lo noté) se escucho casi como un grito en la habitación, un grito de mujer, lo que me permitió reconocer que quien se encontraba debajo de mi novia era su compañera de cuarto…

David les dio la espalda para tomar mi cara y se volteo nuevamente a la pareja de lesbianas que se encontraban en la cama. Solo fueron unos pocos segundos y unos pocos pasos. Pero para cuando se dio cuenta de lo que estaba pasando ya era muy tarde, había entrado tan entusiasmado a grabar, y como le había dicho Aníbal, a dejar plasmado para la historia el momento para que yo me sacara a esa mujer de la cabeza por el resto de mi vida y no volviera a pensar en ella, no le dio tiempo de reaccionar ante el ataque de mi… Ella que no estaba besándose con su compañera de cuarto, sino que estaba practicando el canibalismo comiéndosela, mordiéndola directamente en la garganta, y dejándola inmovilizada con su cuerpo…

Demasiado cerca y sin poder defenderse de un ataque brutal, donde empezó a comérselo a él también… Ese era mi re-encuentro con mi novia, una Caníbal, comedora de personas, y cuyo apetito estaba al parecer desatado como un animal y una bestia que tenía mucho tiempo sin tomar ni un bocado de alimentos…

Yo la amaba, y ella me quería… me quería como su próximo bocadillo de media noche, me quería como solo un animal puede querer sobrevivir en un mundo donde es el último de la cadena alimenticia. Y yo era su próxima comida a menos que hiciera algo…